Los súper alimentos que incorporados a tu dieta, te ayudan a mantener
tu sistema inmunológico fuerte y sano.
Aprende sobre estos alimentos y sus beneficios. Saborea con regularidad estos inmunoestimulantes naturales, que pueden conseguirse con facilidad en un almacén o dietética cercana, y recibe las recompensas de tener un sistema inmunológico fuerte, piel saludable, más energía, menos dolor, mejor memoria y mejor humor:
1. Súper hierbas
Las ‘súper hierbas’ inmunoestimulantes pueden consumirse con regularidad como los alimentos. La moringa una planta nativa de las laderas del Himalaya. Sus propiedades son: acción antioxidante, antiinflamatoria, analgésica, antireumático, antimicrobiano.
Otro es el Ginseng phanax, estimula la memoria, reduce la fatiga, mejora la energía física y mental, calma la inflamación, reduce el estrés y previene el envejecimiento. Es un denominado ‘adaptógeno’ que ayuda al cuerpo a adaptarse a las condiciones estresantes diarias.
2. Súper alimentos
Estos son alimentos vegetales, particularmente altos en nutrientes beneficiosos para la salud. Los súper alimentos a incluir en tu dieta son:
Camu camu:
es conocida como fruta antiviral y antigripal, y se cree que es un tratamiento efectivo contra males como el herpes labial y herpes zóster, el resfriado común y la tos. También es un antiinflamatorio y emoliente, tiene un alto contenido de vitamina C. Puede tomarse a diario con limón y miel como un elixir de inmunidad, y es ideal para los niños, ya que puede agregarse a las bebidas, no tiene azúcar y puede dosificarse según la necesidad.
El baobab:
contiene calcio y magnesio necesario para fortalecer los huesos. Es por este motivo que se recomienda incluir fruto en dietas dirigidas a prevenir enfermedades como la osteoporosis. Asimismo, su alto contenido en potasio, convierte al baobab en una rápida fuente de energía.
Los champiñones:
Los hongos en general contienen vitaminas, como las del complejo B (niacina y tiamina, riboflavina y ácido fólico) y minerales como el potasio, fósforo y calcio. El champiñón también contiene selenio, que funciona como antioxidante que ayuda a prevenir ciertos tipos de cáncer.
Los champiñones japoneses:
Es destacable su aporte de cobre, que refuerza el sistema inmunitario y ayuda a combatir procesos inflamatorios, así como de los antioxidantes selenio, manganeso y zinc representan asimismo buenos aportes y en menor medida, hierro, magnesio, fósforo y potasio. Shiitake, Maitake y Reishi parecen ser los más efectivos, y pueden comerse a diario.
3. Probióticos, prebióticos y alimentos cultivados
El aparato digestivo, es la defensa de primera línea del sistema inmunológico y depende de las bacterias vivas (o ‘microflora’) para trabajar eficientemente. Tanto los prebióticos, como los probióticos, apoyan la salud inmunológica promoviendo el crecimiento de bacterias intestinales beneficiosas y deben incorporarse a tu dieta todos los días. Una fuente excelente de probióticos es el yogur natural, conviene comerlo todos los días, otras buenas fuentes de prebióticos incluyen los espárragos, la banana y las endibias. También los alimentos cultivados fermentados, tales como kimchi, kombucha, goma guar, chucrut y kéfir.
4. Frutas y verduras coloridas
Las plantas contienen miles de compuestos naturales denominados fitoquímicos que ayudan a protegerlas de gérmenes, hongos y otras amenazas. Estos químicos también pueden protegerte. Opta por frutas y verduras temporada, ya que estas tienden a contener más nutrientes. También es mejor comer las verduras crudas. El más poderoso de todos los antioxidantes alimenticios se encuentra en la familia de los frutos rojos, por ejemplo arándanos, moras, arándanos rojos y frutillas.
Las antocianinas (Protegen los capilares de la retina; tienen un papel beneficioso para la vista. Ayudan a reforzar el sistema cardiovascular. Tienen un efecto antioxidante potente. Son antivirales; ayudan a combatir resfriados, infecciones y alergias) les dan a los frutos rojos sus colores intensos y vivos, rojo o violeta intenso. Los frutos rojos también contienen cantidades impresionantes de vitamina C.
Los ejemplos de otros fitoquímicos que estimulan la inmunidad y sus fuentes alimenticias, incluyen:
Carotenoides amarillos en la batata y la calabaza amarilla, Licopeno rojo en los tomates y la guayaba, Alicina blanca en el ajo, Quercetina en las cebollas, Resveratrol en las uvas moradas y el vino tinto.
5. Té verde
Propiedades del té verde
- Poderoso antioxidante.
- Un estimulante suave.
- Mejora el funcionamiento del cerebro.
- Favorece la combustión de las grasas.
- Mejora el rendimiento físico.
- Reduce el riesgo de sufrir ciertos tipos de cáncer.
- Previene las enfermedades cardiovasculares.
Bebé sorbos de té verde con regularidad. Esta bebida popular china rastrea radicales libres que causan enfermedades en el cuerpo y protege a las células contra el daño al ADN.
El zinc
Es necesario para que el sistema inmunitario funcione apropiadamente. Participa en la división y el crecimiento de las células, al igual que en la cicatrización de heridas y en el metabolismo de los carbohidratos. El zinc también es necesario para los sentidos del olfato y del gusto.
Se encuentra en las carnes de res, cerdo y cordero que contienen mayor cantidad de zinc que el pescado. La carne oscura de pollo (patas) contiene más cantidad de zinc que la carne blanca.
Otras fuentes de zinc son las nueces, almendras, maníes, los granos enteros, las legumbres y la levadura.
7. Agentes desintoxicantes
Algunos compuestos ayudan al cuerpo en el proceso desintoxicante. Por esta razón, reducen la carga en el sistema inmunológico. La clorofila facilita el desempeño de las funciones de defensa por parte del sistema inmunológico. Evita flatulencias, mal aliento y pesadez estomacal. También tiene la capacidad de alcalinizar la sangre, convirtiéndose así en un medio menos propicio para el desarrollo del virus y bacterias. Para conseguir estos beneficios, deléitate con todas las verduras verdes que sea posible.